No me canso de admirar el arte normando. Ayer estuvimos en el Palacio de los Normandos y la Capilla palatina es impresionante. El palacio es hoy sede del Parlamento de la región siciliana. Primero fue una fortaleza de defensa fenicia y romana. En el siglo IX, los árabes consolidaron la estructura y construyeron el palacio del emir.
Los normandos, junto con los suebos , lo ampliaron y emplearon una decoración bizantina y árabe. Lo convirtieron en un centro de civilización y cultura. Federico II de Suebia hizo de su corte en Sicilia un albergue de poetas, escritores, filósofos y científicos. Por todas partes del palacio aparece el escudo de los Ausburgo.
En la plaza de la catedral, nos cruzamos con unos franceses de la Saboya. Prácticamente, por el centro, todos somos extranjeros, hoy es Ferragosto, una fiesta laica que los italianos celebran desde la época del emperador Augusto y que el catolicismo hizo coincidir con la Virgen de la Asunción, con la Virgen de Agosto. Ferragosto es el momento culminante del verano italiano. Las ciudades se vacían y la gente come en familia o con amigos en la playa o en la montaña. Hay desfiles, fiestas, procesiones por todas partes. Y en Siena celebran el Palio.
En la plaza de la catedral, nos cruzamos con unos franceses de la Saboya. Prácticamente, por el centro, todos somos extranjeros, hoy es Ferragosto, una fiesta laica que los italianos celebran desde la época del emperador Augusto y que el catolicismo hizo coincidir con la Virgen de la Asunción, con la Virgen de Agosto. Ferragosto es el momento culminante del verano italiano. Las ciudades se vacían y la gente come en familia o con amigos en la playa o en la montaña. Hay desfiles, fiestas, procesiones por todas partes. Y en Siena celebran el Palio.
Volvemos al Vicolo Guascone atravesando el mercato di Ballarò. Las terrazas están repletas, pero hoy solo trabajan unos pocos vendedores. En nuestro apartamento, nosotros también tendremos nuestro pranzo di Ferragosto a base de una ensalada de rúcula con pimientos asados, tomates secos de Sicilia, mozarella y pesto, gnoccis de patata con champiñones, albahaca y pomodoro.
Vendrán Laura y Margareta con una amiga a brindar por Ferragosto y por nuestra despedida. Y pasaremos la tarde en el barrio de la Calza, en el Giardino Garibaldi y en el puerto. Mañana nos vamos del vicolo Guascone. Como decía Ernestina en La importancia de llamarse Ernesto, de Oscar Wilde... Qué triste es despedirnos de las personas que acabamos de conocer.
Mañana, vía Roma, llega Roberta Barbuscia. Nos vamos de Palermo.